Defendiendo a Jacob

10.12.2020

Una vez más vengo a recomendar un drama criminal. Esta vez es una serie distribuida por Apple TV., un formato de visualización en directo relativamente nuevo. Sin embargo, el contenido que provee a sus usuarios es de calidad. Me enganchó desde el primer capítulo de la mini serie, y no dejé de verla hasta terminarla. Hasta ahorita no he encontrado ningún título producido por la manzana mordida que no sea digno de ver. Esta recomendación no es distinta a lo que les vengo contando.

Defendiendo a Jacob nos plantea los siguientes personajes: Andy, papá de Jacob que es fiscal adjunto; Laurin, mamá de Jacob quien es profesora de educación básica; Jacob, un adolescente de catorce años; y el abuelo, a quien llamaremos Sr. Barber. Ellos conforman la familia Barber. Debo decir que Andy es el guapísimo actor Chris Evans. Si soy sincera, comencé a ver esta serie por él. Además, tenía dudas al verlo desarrollar otros papeles diferentes a los de Marvel Studios. Es cierto que me pareció extraño verlo como un padre de familia, a pesar de ello, me sorprendió totalmente con su nuevo papel para este proyecto y sí que la rayó.

Volviendo al tema... Al parecer llevan una vida normal. Una bella familia, nada de problemas. Hasta que un día, Andy es llamado al corazón de un bosque donde se cometió un crimen. Han asesinado a un muchacho de catorce años a cuchillazos. No se encuentra el arma, solo al niño boca abajo lleno de sangre. En el desarrollo de la investigación, continúan haciendo los exámenes forenses respectivos. Los resultados señalan que hay huellas dactilares del hijo del fiscal, por lo tanto, debe ser removido del caso y asignar a uno nuevo, pues su presencia puede alterar el proceso. Entonces, Jacob es acusado por la fiscalía de Massachusetts por homicidio en primer grado. Además, hay un nuevo sospechoso: personas de la zona vieron a un señor merodear por los alrededores horas antes del descubrimiento del cadáver.

Aunque se descubrieran las huellas dactilares, estas no son determinantes para acusar a alguien en un caso, por lo que las investigaciones continúan y salen a la luz unas pruebas extrañas que ponen en tela de juicio la situación del adolescente. Los padres mueven cielo y tierra para comprobar la inocencia de su hijo, pero ocurren sucesos que les será cada vez más difícil creer en la palabra de Jacob. ¿Qué pasará? ¿verdaderamente Jacob es inocente o cometió el delito? Todas estas interrogantes se resuelven en el último capítulo, dejando una situación crítica al final.

Mis últimos pensamientos cuando acabé de ver la serie fueron: ¡DIOS MÍO! ¡NO PUEDE SER! El final me dejó un gusto agridulce en la boca. No fue lo que esperaba, pero qué se puede hacer. No siempre obtenemos lo que deseamos. Aunque solo diré un comentario final: hay secretos que te perseguirán toda la vida. 

CoMen - Revista
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